Concretando

Las personas necesitamos ayuda de los demás constantemente. Aquí está una de las claves del ser humano: la socialización y lo que ello conlleva.

A menudo pensamos que con generalizaciones el individuo es capaz de abstraer lo que intentamos transmitir: Hay que educar en las virtudes a nuestros hijos…, deben ser generosos, no hay que sobreprotegerles…
La auténtica ayuda es la que nos ofrecen cuando nos concretan objetivos de mejora.
Mi amigo Jordi Cebrià lo hace estupendamente cuando, al terminar la etapa de primaria ejemplifica, a los padres, lo que es un niño con poca autonomía:
- Si vuestro hijo, a estas alturas, no se limpia los zapatos, no se hace la cama y no se prepara la bolsa de deporte, os faltan todavía deberes por hacer.
Así pues, pongámonos a trabajar antes de que algún día se nos acerque y nos pregunte esas cuestiones.