Y ya hemos llegado a día 2. Primer día laboral del año y para muchos es el primer día para iniciar los propósitos que se hicieron al iniciar el año.
Unos pensarán que esa tradición de proponerse objetivos es una tontería pero que bueno sería que, de vez en cuando, parásemos el reloj para marcarnos nuevas metas.
Para nuestros hijos es muy bueno que nos vean proponernos aspectos de mejora. Es bueno proclamarlos en voz alta porqué ello comporta compromiso ante los demás.
Un aspecto hay que tener presente: de igual forma que lo hacemos en el trabajo, nuestros propósitos deben ser evaluados. Márcate unas fechas para evaluarlos y alguien que te ayude a hacerlo. Quizás tus hijos, tu mujer, tu marido…
Sólo una cosa más: ¿cuántos de vosotros os habéis marcado objetivos que tengan a ver con vuestra familia?: llegar antes a casa, llamar a tu pareja más a menudo, dedicar más tiempo a los hijos, realizar alguna actividad familiar todos juntos… Ánimo, todavía estáis a tiempo.
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